Esperamos que os guste tanto como nos ha gustado a nosotros este primer artículo titulado:
"La era de los clubes chicos".
En estos últimos años, el fútbol argentino se ha visto invadido por logros de clubes chicos y de menor reputación.
Estudiantes, Velez, Lanus, Banfield y Argentinos, han logrado campeonar, postergando a los tradicionales clubes grandes del país.
La principal cualidad y habilidad de estos clubes, se basan directamente en el ordenamiento dirigencial y una fuerte política de divisiones inferiores.
Por un lado, los clubes más grandes del país; Boca y River, vienen arrastrando deudas suculentas que les achican la brecha para invertir en jugadores, así mismo las inferiores se vieron disminuidas, ya que la calidad de sus jugadores no es la de hace años. También sufren las acciones rapaces de dirigentes europeos que se llevan jugadores de muy corta edad y por escaso dinero.
En estos casos, sumados a los de Racing y Independiente, vemos un desorden dirigencial de arrastre y la poca inversión en el semillero del club, que es lo más importante en base al futuro.
Los clubes grandes, apuestan a proyectos a corto plazo y están sufriendo la emergencia financiera.
Por otra parte y en contrapartidas, los clubes de menor tamaño y con menos presupuesto, se han visto beneficiados, ya que mantienen un semillero a largo plazo y apuestan en inversiones pequeñas de nombre, pero grandes de resultados.
El claro ejemplo es Estudiantes, el último campeón, que ha sabido plasmar su política de inferiores, en la cancha e invirtió en pocos jugadores, pero a proyecto a futuro. Apostando a un movimiento lento, pero por decantación dio sus frutos.
Estos clubes han sabido aprovechar las oportunidades y tomaron el protagonismo del fútbol argentino.
En pocos días comienza el nuevo torneo y la tendencia es la misma. Los denominados clubes grandes, volvieron a comprar mucho apoyados en grupos inversores y desterrando por completo las bases de los logros; ordenamiento dirigencional y divisiones inferiores.

Un buen desarme de lo que está pasando en el futbol argentino.
ResponderEliminarHabria que refundarlo
Saludos
Me gusta la columna, porque refleja lo que estamos pasando. El futbol argentino, se convirtio en un juego solo de clibes menores que desprestigian la tradición de los grandes de siempre.
ResponderEliminarOjala cambie esta tendencia.